LA MUERTE EN VILLARLUENGO
En
su última novela, El viaje del anarquista,
Elifio Feliz de Vargas vuelve a un espacio familiar y querido, el Maestrazgo.
Quizá sea por su profesión de veterinario, pero lo cierto es que se encuentra
como pez en el agua o mejor como treparriscos en el roquedo de los ambientes
rurales: vive y hace vivir su paisaje; participa de la dimensión humana y
sentimental de sus gentes; conoce y da a conocer sus problemas; escucha su habla
y la reproduce con gracia y precisión. De alguna manera, el viento trágico de
su Días de cierzo (2006), obra con la
que ganó el I premio de novela “Comarca del Maestrazgo”, vuelve a soplar sobre
las páginas de esta y con él los ecos de todos los grandes narradores –Baroja,
Castro, Ribas, etc.- que supieron ver en esas mágicas montañas de difícil
acceso un territorio literario donde todo es posible, al menos en la ficción.
La
novela se enmarca entre dos momentos históricos: arranca en julio de 1909
durante los sucesos de la Semana Trágica de Barcelona y concluye en octubre de
ese mismo año con el fusilamiento del pedagogo y anarquista Francisco Ferrer
Guardia. Entre tanto nos cuenta la azarosa huida de su joven discípulo,
Francesc Casals, prófugo del ejército español, que buscará refugio en el pueblo
del Maestrazgo turolense de Villarluengo, donde bajo una identidad falsa
trabajará como mozo de botica, tratará de llevar a cabo los postulados de la
Escuela Moderna de Barcelona y vivirá una historia de amor con la Chica Natividad.
El viaje del anarquista
es una novela coral, no solo en cuanto a los personajes, sino también en lo que
respecta a las voces narrativas, al estilo y a los temas (el anarquismo, la
situación de la mujer y de la educación en España a comienzos del siglo XX,
etc.) Un narrador omnisciente nos relata unos hechos que fragmentariamente
distintas primeras personas complementan desde su punto de vista y explican con
su propio registro idiomático. Es decir, Elifio escucha a sus personajes y los
deja conversar con el lector respetando en todo momento sus actos de habla o de
escritura, pues también hay una importante relación epistolar entre ellos. De
esta forma, la estructura de la novela resulta un tanto compleja al principio,
pero conforme avanza, se ensambla de manera perfecta y al final las preguntas
que se han suscitando en su desarrollo encuentran sus respectivas respuestas,
componiendo un tan preciso como excelente rompecabezas narrativo.
Junto
con el protagonista y su antagonista, esa concentración de sangre de Caín de la
España profunda que es el Raidiera, destacan los personajes femeninos, en
especial el de Natividad, una joven extrañamente letrada para aquellos tiempos
y pagos, y el de su abuela, doña Purificación, una especie de doña Rosa celiana
dueña de la casa de huéspedes donde se ubica la botica. Sin olvidar a los
secundarios de lujo: Remigi Casals, Angelita, el Tuerto, Aurora, etc. Sus
descripciones de presentación son en todos los casos memorables, incluidas las
de los escenarios.
La
novela se construye sobre un sólido trabajo de documentación, si bien Elifio
surfea sobre los acontecimientos históricos y, aunque los trata con rigor, no
cae en vanas disquisiciones filosóficas ni deja que se vean las costuras de las
lecturas previas. Tan solo sutiles pinceladas aquí y allá para ambientar la
acción. Lo que de verdad le importa es la forma, moldear el lenguaje en la
fragua del estilo y con una prosa poética a veces, irónica en otras, ágil
siempre, salpimentada con ese humor tan “elifiano” o “feliziano” tan suyo,
tendente a lo escatológico y morboso, tan divertido como trágicamente doloroso,
nos relata una historia sencilla y tremenda que trata sobre lo ineludible del destino
humano: la muerte, igual da que sea en Samarra que en Villarluengo, siempre te
estará esperando. Solo nos damos cuenta de la verdadera crudeza del relato
cuando llegamos a su final, aun a pesar de que el autor se ha permitido el lujo
de anticiparlo cinematográficamente en el comienzo. Fantástica boutade al alcance de muy pocos
escritores.
ELIFIO
FELIZ DE VARGAS, El viaje del anarquista,
Valencia, Rasmia Ediciones, 2018
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